INTRODUCCION AL DIARIO CONSTITUCIONAL DE MEXICO. „ , j a .............ii Tt No ha tenido la N. E. época mas brillante pa- ra conocer el #énio y aplicación de sus hijos, á la literatura y las ciencias útiles, que la que se señaló con el establecimiento del DIARIO DE MEXI- CO en i. de octubre de 1805. Este periódico, es- timuló la aplicación en tanto extremo, que en aque- llos días dichosos parece que no se pencaba tn otra coka, que en escribir sobre todas materias, dispu- tar inocentemente sobre objetos curiosos y alahue— ños, proyectar medios de adelantar nuestra agri- cultura, industria y comercio, y de rectificar la educación y las costumbres de nuestros pueb'os, florecientes entonces en el seno de la paz mas pu- ra. De la capital del reyno, y de las provincias y sus pueblos mas remotos se rerritirn á los edic- tores del DI/^RIO varios papeles «•obre proyectos útiles, pensamientos delicados, poesías risueñas, sá- tiras saladas, y otras muchas piezas de bella lite- ratura que se leen con pl?cer en los pocos juegos de tómo» que se conservan entre algunos curiosos. For n-ano-a, que el LIA'RIO DE MEXICO, era por decirlo así, el ídolo político y literario de aquellosn dias venturosos, de paz y de abundancia; pero ¿ quis talla fando íemperet á lacrimis ? ¿ quién al recordar lo - terribles sucesos que después intervi- niere);), podrá contener las lágrimas í Llegaron los obscuros dias que señalaban Ia> singadas invasio- nes de la España por el me vino* sobrecogido^ de terror. .Le pues nos abismar*)» esos mismos males <-n el caos de la discordia, se abrió el templo de Jano, los hijos declararon la guerra á sus padres, éstos á *us hermanos, y las mi-tnas familias que poco antes gozaban en paz felices dias de unión y de comento, las vimos des- pedazarse al fu'or de la discordia. ; Y nuestros escritores del EIARJO? ¿ aque- llos dulces poetas que nos proporcionaban los momen- tos mas dulces de desahogo en nuestras fatigas, con la lectura délos encantos de su imaginación ?j Ahí el uracán terrible azoró á unos, haciéndolos enmu- decer, y á otro> los arrebató pava confundirlos en el abismo de nuestras comunes desgracias. El TIA- RIO entretanto, que vivia de estos génios encanta- dores que lo animaban con sus bellezas y estudios útiles, lo abandonaron, y tomó después por sentido contrario el carácter de pregonero de las desgracias de la pátna, hasta que enronqueció, se debilitó, mudó de tutores, adquirió n ¡evos resabios, se con- sumió su naturaleza, y por fin el último tutor que tuvo, por la complicación de circunstancias, y porque ya no habia quien le proporcionase el mas leve ali- mento, lo abandone) en un hospital desde principiosIII del ario 16, lo desnudó de sus vestidos de ceremo- nia y los entregó al NOTICIOSO , GE£¡ ERAL, que los ha conservado con o buen mugo. Pero alumbraren ya lo* felices dias de nues- tra regeneración, la luz baró en torrentes nuestros ojos y alegró nue tro continente con la libertad de imprenta, que como don ceiestial vino á propor- cionar el disahogo de nuestros rpnmidos crrabo- nes. \a en ctro tiempo alhagó nuestros vacilantes ojoí» una luz igual que desapareció como fuego fatuo, dexsndo solo los rastros de un sendero efí- mero; pero fué porque no detendrán del ícl aquellos b íl'os, con*) los que hoy dirigen nue tros pases después que el inmortal FERNANDO sancionó con juramento eterno la augusta ley de nuestra li- bertad. ;, i Y yacerá aun el DIARIO DE MEXICO en su silencioso a atimiento, cuando un enxambre de escritores de todas clases, vagan en el orbe li- terario, tal vez buscando este antiguo conducto de las producciones, de la aplicación y del estudio de nuestros ingenios ? ¿ No habrá quien le dé la ma- no para salir del hospital donde cayó desde el año 16, para conducir sus pasos, y fortalecerlo aunque sea con alimentos precarios ? Cómo que nó ; tam- bién hay literatos piadosos: sí señor, aun viven los Carótidos, Anj risos, Barueques, C huí rip.mplis, Tocayos de Clarita, Coqueli/las, Llambrtas, Joco- sos, Jaraneros, Encuerados, Compasivos, Observa- tivos, Escarmentados, Arezis, Dorr/gtfs, Antpeves, &c. &c. 8rc pues Santiago y á ello ; una pronta resolución es una victoria comenzada: mañanaIV mismo saldrá el primer número, nada tenemos que hablar de plan, porque no variaremos» ni un ápice del que se seguía el año de 5. Todo cuanto se nos presente con el carácter de instrucción y utilidad á nuestros conciudadanos, será el objeto principal de este DIARIO ; rangos instructivos de agricultura, de artes, de comercio, de economía política, de medicina, de estadística y de todo cuanto nos pueda ser útil, sea propio ó ageno, pues importa poco que el agua venga del Jordán, del Nilo, ó d¿ la acequia de Ixta.alco, con tal que sea pura y que alivie á los sedientos. En fin, politica^emos y nlosoíaréraos mas que un co- torro ; pero siempre con aprovechamiento, con in- terés, sin apelmazarnos, y sin gastar la pólvora en salvas. Se reciben las subscriciones en esta rflcina, y en la librería ce Recio, portal d¿ los Agustinos i razón de 14 reales por mes para dentro de la Ca- pital, y j8 para fuera francos de porte. Los suple- mentos, índice, carátula y lista de sur»CTitrres se •darrí gratis á los que 1"> verifiquen. Si se nos remiten artículos ó noticias, de los lugares foráneos, deben venir francos de porte, sino no se sacarár>, ni se les •dará curso en las estafetas como hemos suplicado á los señores admini>tradores, pues el gravamen que nos resultaría de lo contrario apenas puede calcu- larse. Dios sobre todo. MF.XICO : !K2o. Oficina de los ciudadanos irvflitSPCBí D. Joaquín v D. Beiiiurdo df ¡Vliiamon, calle de Jesús tiúin, 16.