Reconocimiento tict nuevo €¡¡robiem,o iVor^orio, jpor* ir* división ttcan- fftjifff/f* en jMToron* ____sy^^¿^^<^^>^^<^^s^'bp— j ■» . ta» • - 1 » »^ mune, y digno: una división compuesta de ó(K) infantes, y mil caballos, marcharon lesde la panadería de Rodríguez á la Plaza del Pueblo, llevando á su cabeza al ciuda- dano D. Félix Alzaga, quien después de haberlas mandado formar en cuadro, arengó á aquellos valientes en la forma siguiente. CIUDADANOS: El Ser Supremo que rige los destinos del universo, ha protegi- do nuestra causn ; Se han salvado las LKVKS B INSTITUCIONES DK NUESTRA CARA PATRIA : vuestros votos están cumplidos. Un antiguo veterano, que muchas veces ha prodigado su sangro cu los campos de batalla, sosteniendo nuestra libertad, ha sido colocado al frente del gobierno ,• no dudéis sabrá llenar sus deberes. Nuestro digno general en gefe, y todas sus divisiones, han reconocido sü autori- dad ; por su orden es que en este inoment» vamos nosotros á llenar deber tan sagrado. CIUDADANOS: Jurai> sostener hasta derramar la ultima gota de sangre, las I FVR« V. INSTITUCIONES OE LA PROVINCIA, y el gobierno nuevamente cons- tituido, que ha recaído en la persona de nuestro viejo y distinguido general, coronel mayor D. Juan José Viamont : Si. juramos, (contestó la división.) En/é de que asi lo cumpliréis—Columna, presenten armas, apunten, Juego : ^/ esta voz siguió una descarga general, y se volvió á dar la voz de, carguen: ~dL hombro armas: Entonces el ge/e dijo, " dudada.tus viva el gran PUKBLO DE BUENOS AIRES; viva su nuevo gobierno, vivan las instituciones y las leyes de tu Provincia: T¿a columna repitió con entusiasmo, mil vivas, y hizo una segunda descarga. Preparada la columna por tercera vex, volvió ú lomar el gefe la palabra y dijo. Ciudadanos viva nuestro virtuoso é infatigable general en gefe, D- Juan Manuel Rosas, vivan todos los bravos militares que lo han acompañado en su larga y penosa campaña, hasta la convención del 2 1 de Junio, en que cesó la causa por que combatimos: vivan los bravos campecinos que sin mas coraza-» ni mas armas que su corage y sus brazos, nos proporciona este dia de contento. Se rihVrim mil ticlorcs, y se hizo la última des- carga. Las campanas del pueblo resonaron en aquel momento, se explicó de un modo inequívoco el alborozo de todos los habitantes que habían concurrido á presenciar aquel acto que terminó marchando la columna por frente de la casa del general de vanguardia, y al pasar por ella cada comandante daba la voz de Viva el general de vanguardia, que era respondida por su respectiva compañía. I/nprmiu del Untado