APROBACION DEL PLAN DE REPUBLICA POPULAR FEDERATIVA, PROCLAMADO POR EL CIUDADANO m San Luis Potosí el cinco de Junio del uño pasado» * MEXICO: 1824. IMPRENTA DE TOMAS W. LORRAW. Calle efe José el Real num, 2, X 3 a kaj*i jaa Vindicación del General Santa Anna geíes y oficiales, que adaptaron y sost£- bierpn el Plan publicado en S. Luis Po- tosí, el día cinco de Junio do 82$, (juexin Loor de la justicia- presenta al píihííco el ciudadano coronel Diego Arguelles, comprendido en el riiismow 18 :*> ': .. 11 '/ül•'.;t a .• i..; oa .3 .V awp inoric Cotíciudadímos; El Gcterál Santa A'nña qtíé tíos ve- ces ha sido el riego Mexicano pasó por el crisol, y su conducta hoy aparece ra más patriótica y laudable, sfls enemigos y en especial él general Armijo, sentirattía doble vergüenza de verlo vindicado, y que sus saétas Venenosas, devieron herir el pecho invicto del primer ^títtldiftí»'Üfc HhcrtHíi L.r»o montirnn, y caluffinitlS" q«C mancharon contra su honor, muchos pliogas de papel se han descubierto, y sus facciosos autores obtendrán en Tecompensa el desprecio, y la ignominia de los hombres sensatos. Los antipodas de la libertad nO lograron con- fundirlo, y se ha empuñado dtínuevo esa espada cuyos filos cortarán la hidra del despotismo. Yo me congratu- lo de haber partido con el héroe el pan de dolor, y que hoy me toque el triunfo y la satisfacción: la calumnia tarde 6 temprano sofoca sus vergonzosos clamores. Dios y libertad. México Abril 1. de 1824. Diego Arguelles. CONCLUSION FISCAL. Vi cumulo de inesperados accidentes, han hecho di- latoria la causa que el predecesor de V. S. me encargó para su secuela en 18 de Agosto del año pasado de 1823, comenzada por el General de Brigada D. Joaquín ParresfijfinA uínc8 ííi'íori'jí* hf) nobfiDifMitV en averiguación do los, acontecimientos do la capital de SffLuis Potosí, en los,meses Junio v julio últimos, ~VW>reSortá¿ dfefp^íj^fftíe^nii^^feseü. Antonio . •López de-Santa; Aíi^íforfc6^o6dp.Jyi}io y adoptaron todos Jos 'geltvs oficiales y-tropa que -alli se hallaban á sus órdenes, ú oxepcioii del teniente coronel'Di'Ma'ria- rio Noriega, el ■comandante de artillería D. Pedro Val- des y tendente do la misma D. Tomás Requena; mas ahora que V. S. se sirve trasladarme t*n 3 del corriente que recibí anoche, la .orden del S. P. E. que en .'Jl del próxúno, pasado. Enerp le dirijió el.Exmo» Sor. Ministro de la guerra, para que dé cuenta inmediatamente con la ¡referida causa en el estado que se halle, me ha parecido conveniente [ á pesar de hallarme decaído de salud, y que el secretario capitán graduado L). Florencio Villareal se encuentra ha porción de días postrado en cama,] aun- que ligeramente hacer un compendio de lo excencial de ki actuación, que en un principio presentó el mas asom- broso aspecto; pero que los acaecimientos subcesivos han i desvanecido y las declaraciones contestes han debilitado el semblante criminal que la rivalidad exaltada dióá ca- da uno de los hechos. — El primer crimen que apareció contra el General Santa Anua, fué laformacion y adop- ción de su plan de 5de junio último acumulado en la cau- sa, y que componen las fojas 8 9 y 10: en mí concepto la habriasido si la esperiencia no hubiera desengañadonos con la evidencia, de que lo espresado en él, era y es la vo- luntad de ios estados: ninguna duda ha quedado por los. gloriosos desenlaces^ que hemos visto ptogresivamente desde el primer pasoquefue la promulgación de la convo- catoria para nuestro digno actual Congreso; y asi es, que si en ta época del pronunciamiento se acriminó al sr. San- ta Ana'por parecer que se abrogaba facultades que no tenia cu tiempos semejantes ú los recientes los ciuda-5 danos celosos del bien general, cuando se ven con -posv- bilidad de evitar un gran mal, ó proporcionar á la nación algún bien, no se detienen en adoptar medidas aun po- niendo ,á peligro su representación con la esperanza de que patentizando los efectos, su buena intención, no tan • solo la repondrá al estado, á que ha sido acreedora, mas tendrá la dulce satisfacción, de que sus contemporáneos y que han suspendido el juicio hasta ver los resultados, le tributan los devidos agradecimientos por lo mucho que ha espuesto, y tal vez sugetarse á la maledicencia de sus i émulos, ú hombres inconsiderados que con ligereza se i prestan á la censura, sin reflecsionar que en las épocas de revolución, como todo es un tejido de diversidad de opiniones al desenrollarse, lo que ayer se vituperó, hoy merece la alabanza pública. — En este caso contemplo al l itado general, íi m:is de que veinte y cuatro testigos contestes, aseguran los motivos que le impulsaron á de- cidirse por la formación de su citado plan, que por las ra- zones antes dichas, tienen una fuerza suficiente para no dudar que fue un efecto de su verdadero patriotismol el cargo que el público le hizo de haberse apoderado de treinta y tantos mil pesos que correspondientes á la ha- cienda nacional, estacionaban en S. Luis con dirección á esta tesorería general, lo tiene bastantemente satisfe- cho con las comprovaciones documentadas de la princi- pal de aquella capital y por todas las declaraciones espre- sadas: la del tercero D. Ignacio Rayón, entonces Inten- dente interino, es efectivo que al caudal se le dió entra- da en la caja, rectificándolo el corte de ella que en copia autorizada en los autos componen las fójas 281 y 282, cuaderno 4. me pasó á solicitud mia el Ecsmo. Sor. Mi- nistro de hacienda, y por ella misma se distribuyó bajo las reglas establecidas, por lo que en mi sentir no hubo mas delito en el general Santa Auna que no haber espe- culo la correspondiente orden superior para que la tro-6 pa de §ü mando disfrutase por cuenta Je sus haberes 3e los treinta y tantos mil pesos; pero si graduó de urgente y necesario sostener la declaración dé las provincias, pi- diendo al actual Soberano Congreso constituyente, en la misma urgencia y necesidad se hallaba para asegurar los recursos de subsistencia para aquella tropa, sin que atentase contra las propiepades de los ciudadanos y asi fue que ocurrió al que le pareció menos gravoso. Se eeso- nera del cargo hecho por no haber dejado entrar al Bri- gadier D. José Gabriel Armijo en S. Luis Potosí, ó lo ique es lo miámo haberse resistido á entregarle el mando de las armas, diciendo que por manifestarle mucho odio y que no parecía sino su enemigo, denigrándole su con- ducta y desconceptuándole en todas partes, le obligó á tomar aquel partido en obvio de mayores males: no me parece dejaría de ser positibo, tanto porque lo aseguran veinte y cuatro téstigos, cuanto por que la política del dia asi lo ecsige, y es la esencial medida para despojar al que se juzga "enemigo de la fuerza moral, y aunque se lo hace también el cargo al sr. Santa Anna de haber he- cho armas contra las de la nación, cuando de ellas con- tra las que sacó de ésta capital el sr. Armijo y después reuniói responde aquel y está provado que por sí no obró activamente, y solo trató de la defensiva como era natural. Sobre la concesión de empleos y grados, prue- ba que los confirió interinamente bajo la condición de que debían ser aprovados por el gobierno legítimo, sin que entre tanto se verificaba, tomasen el ceseso corres- pondiente íi la pága del ascenso, y respecto á sugetarse á la aprovacion, manifestó su sumisión. — Todos los de- mas acontecimientos desgraciados, fueron sin disputa emanaciones del plan que el sr. Armijo se propuso, y que la tropa del sr. Santa Anna persuadida de su supe- rioridad en instrucción y numero quiso sostener, y que ya no estubo en arvitrio de este evitar; pues cuando unatropa se desordena y los gefes tforoan procidencias no suelan alcanzar por mas empeño que se ponga para que surtan el electo que se . desea, y entiendo que en tales circunstancias ya está fuera de responsabilidad el que manda en gel'e. — Por lo [* ] que respeta al coronel gra- duado D. Diego Arguelles, los ecsesos fueron efecto de su carácter violento y poco leflecsivo, que como debe- mos esperar no volverá á mandar tropa, se desvia el te- mor de que los repita, y con el tiempo que ha sufrido de arresto y privaciones consiguientes, los cousidero sufi- cientemente compurgados; lo mismo que los que se no*, taron en los demás oficiales, capitán D. Vicente Arca-. dioMajagoitia, teniente coronel graduado D. Juan Es- covedo y capitán graduado D. Ricardo Toscano, á quie- nes se acriminan con ecsageracion en las sumarias que se formaron cu S. Luis Potosí y pueblos de su compre- hension por disposición del sr. Armijp, en que aparecie- ron hechos notoriamente abultados y otros sin prueba suficientes y para su justificación después de impender Vn gran trabajo y dilatado tiempo, resultaría al fin infru- tuoso, por la distancia que ha) de los afectos que causa el acaloramiento de las pasiones, á la calma que le su- cede. - Por tanto y en consideración á los servicios que ba prestado á la Patria el sr. general de brigada D. An- ( * ) El sr. Fiscal sr olvidó que en sostener las órdenes de ini gene- jal v dejar bien puestas las armas, no hice mas que llenar los sagrado» derechos de mi instituto, pues vi que aquellas, apesar de mi moderación iban á ser atropelladas c< mo manifiesto en mi representación al Sobe- rano Congreso datada en S. Agustin de las Cuebas en veinte y cuatro de Agosto de 823. A si es que solo hice repeler la fuerza, ron la fuerza y no manifestar aquel carácter tivio y vergonzoso con que en el din, por des- gracia nuestra se presentan algunos que portan la ht nri asa divisa militar, y abandonan á sus gefes cuando las circunstancias aparecen poco labora- bles. El sr. fiscal puede por sr mismo calcular, cuan difícil es en las con- vulsiones políticas acertar con lo mejor y decidir sobre la conducta po- lítica y militar de cualquier ciudadano»„ 8 Ionio López de Santa Anna, soy de sentir que se sobre- séa á todo, si así lo juzgare conveniente el supremo go- bierno, o el tribunal adonde V. S. haya de elevar esta cumulosa causa que he dividido en seis cuadernos, que pasó ámanos de V. S. en cumplimiento-de aquella or- den; el primero compuesto de 122 fojas útiles. — El se- gundo de 61 y 4 sin numeración. — El tercero ríe 41.— El cuarto de 117. —El quinto de 30 y el sesto de 74, á mas, dos oficios de remisión de los dos últimos: de todo lo cual espero que V. S. tenga la bondad de acusarme el correspondiente recibo para mi resguardo. — Dios y li- bertad. México 6 de Febrero de 1824.—Miguel Torres. — sr. general de Brigada L). Miguel Barragán, coman- dante general de éste Estado de México. Señor comandante general de este estado D. Miguel Francisco Barragan. En cumplimiento délo queme previene V. S. en un decreto de 25 de Febrero procsimo pasado», he visto la* sumaria que de orden del S. P. E., se ha formado con- tra el sr. D. Antonio López de Santa Anna y algunos otros oficiales, el parecer que reunidos en junta dieron los srs. generales de esta guarnición el dia 11 del espresado nies, y los votos particulares del Ecsmo. Sor. General de división D. Manuel de la Sota Riva, y del graduado de brigada D. José Mendivil, y habiendo meditado sobre to- do con la cscrupolosidad que demanda un asunto de es- ta c lase, hecreidoque debo subscribir al dictamen ó in* forme que dió á V. S. el sr. general de brigada D. Mi- guel Torres en 5 del citado Febrero, fundado en las razc- nes que tuvo presentes aquel gefe y reproduzco yo, y en las que espondré mas adelante. El pronunciamiento del sr. Santa Anna en S. Luis Po- tosí, fue una continuación del que hizo en Veracruz el día2 de Diciembre de 1822. Si por aquel glorioso grito que logro la común aceptación y que la junta de Generales. Contempla igual á este otro, mereció su autor la gratitud de la Patria y la consideración del gobierno, no hay mé- rito para acriminarlo por el plan de 5 de Junio del próc- sirao pasado, pues este y el de "Veracruz, terminaban Ci aun propio objeto, se apoyaban en razones idénticas y han sido igualmente aceptadas. Lagran prueba de que el sr. Santa Anna, proclamó una cosa buena en sí misma, buena por los motivos que la impulsaron, y buena por el ecsito que ha tenido, es que la Nación Mexicana ha adoptado para su gobierno la for- ma de Repub{icá representativa Popular federal, que esta forma es la pronunciada por la opinión, y la que la Nación, ha pedido pn una, actitud decisiva según se explica el Soberano Congreso en su manifiesto de 31 de enero de este prerente ano. Podría decirse acaso que el crimen del sr. San- ta Ana, no consiste en haber opinado á favor del sistema Republicano, sino en haber anticipado su proclamación á la declaración que debia esperar con- forme á lo enunciado en el Soberano Dcerero de 21 de Mayo de 1823, debe considerarse que iffp hay en toda esta sumaria ni una sola constancia de que hu- biera llegado á. S. Luis el citado decreto, y que co- mo asegura el mismo general temió que en el largo intervalo que debia mediar desde el 5 de Junio en que aun no se expedia la Convocatoria, pues salió el 17 del referido mes, hasta que se instalara el fu'uro Congre- so que habia de declarar la forma de gobierno, podrian sacar partido los enemigos de uuestra libertad y llevar adelante los proyectos de que jamás se han olvidado incluso el de impedir la reunión de la representación Nacional según se nos ha dicho en el Soberano decre- to de 2 de Octubre del año pasado.■ J'p 0.€úando depuso esos tomores, que lmtiían^piies? jo ya cu movimiento á otras varias Provincias: cuando biahcésádocIosJ'motiv¿s'qíieÍ() indujeron a. tbmáft^s ar- mas y se-puso con ellas á'disposición do los supremos po- deres, sin que nineijiha fuerza. Le b^M^BúleS'toBtir^ feos- tenerse facilítente, ,sbgW [M &Umts cpWátSfí¿lííá *M& obran en los e uadernbsT.f ry "á.^iüe.^s^sürnd/ía'!'^'!' IN.driahaoers^eca^ pronunciamiento, trató de aumentar la fuer'za'¿iié '"tenía loque arguye ([tic no se condujo con el respeto y sumisión correspond ten fes. Pero é.s cWoaw e' el Ej^fcüq próteciSr ¿e la libertad Mexicana cfebfo formarse, ¿éguli espresa" el plan, para sostener,)-' garantir á las demás provincias que se adhiriesen eSDOntanl amonte, y 'que,' siririiebcjar- sv para nada en ninguna operación hostil, solo le seña licito repeler lu fuerza en caso de ser piUcado[ú de que se ateníase contra ía libertad de téjrPfaÓÍo$?¡or™ >Vj AI cargo que se le hace por habof tomado de propia au- toridad treinta y tantos mil pesos aue'enoarrab$Mrah.áe Durango a esta capital, ha con test arfo él sr. Santa Auna, del modo mas satisfactorio en su declaración de fojas ;fS.,,ttIiá, mientras no se adhiriese al pían, dejara ofé!!¿stíir resin- tido y dé hacer pfeVsph'aJ la disputa cQue otra cosa ac redi- (lifan las expresiones fuertes de que usó en sus procla- mas, y en ja circular de II de Junio último que corre Sá fojas 215 del cuaderno '<>4? r;Que otra cosa acredita esa • dccianiaciou ó ¡sea olido que dirigió aJ tauieiite corenel D. Ramón .Chayes?, al encargarle formase la sumaria? [ * ] ¿Y «pié otra cosa arguje e l haber dado participio aldfc- ( * ) Fste mi-mo Copiisn fi;ó (!<> Ie s primeros rjfte adoptaron y díe» rr.ii in;pulso ¡¡I pl;n> )^4>aqwpll^ paiítOide'sufe sueldos que sei le* tt;.y el bien.deiSíiía:* que es la su- píeu>tt ley jiidtJ qne-rio te ¿r^wwtiJicBo que. lia se! le» gr^Vieei» i^;p:rQse^W¡QÍiO»v4e¡*iD»:!it^WariqÜCiqsip dftwl» ÜjH vería ser eter.09,i,pi«)üuaitt*'Iua tesíig^í que babrian dftr ecsaminarse y carearse, están diseminados por puntos muy disMn(o«. orl-Mirn .8 ./ u ■ú/wu? zoilx Si es pues del agrado de V. S. podrá servirse decla- rar que no ba^r^ulta^ oi.^es^lta cargo alguno contra el sr. Santa Alina, pues antesl)ien merece por el pi'o- miiK-iamre^jtoldPSPlUtAs la¡> ibfei^ií^e^i^ratíft^eé^ue por su grito en Veracruz: mandarse sobresea en esta su- maria, por lo respetivo á todos los srs. gcf'es y afiélales comprehendidos en W^rsirva de nota, ú obstáculo para, sus ulteriores ascensosj ^frepe^Yade que, por lo to- cante ú' algunos de ellos, baya causa distinta para que no les aprovecho esta declaración. Tal es mi parecer que sujeto a otro mejor México 22 de Marzo de 1824. i0 y 3.°,— Lie. Ignacio Alvarado. Es copia. México Marzo 29 de 1824. 4° . y 3.° La sumaria que se formó & V. S. por la conducta que «bservó en la provincia de S. Luis Potosí, desde princi- pios de Julio último, y el plan que proclamó en la cita- da ciudad el 5 del misino; la siguió en clase de fiscal el sr.. General de Brigada D. Miguel Torres, quien ha-16 ciendo un ecstracto de todo lo actuado; pidió en 5 de Febrero próesimo se sobreseiera en ella, y habiéndola pasado al Lic. D. Ignacio Alvarado, qnien concluyó su dictamen esponiendo lo qne consta de la copia que acompaño á V. S. para su conocimiento y satisfacción sirviéndole de gobierno que el todo del parecer estendi- do por el Lic. Alvarado, se va hacer notorio en la or- den general de la plaza, y espero se dará igual paso por la gaceta del gobierno respeto á que con esta fecha doy conocimiento con una copia al Ecsm. Sr. Ministro de Relaciones, pidiéndole que si lo tuviere íi bien se sirva mandarlo estampar en el indicado periódico. Dios guarde á V. S. muchos años. México 24 de Marzo de 1824. Miguel Barragan. iíj ■'.<■{ )) m:;i¡u;;:d fewtfi fe >uq tp'iuA ti ■ ¿ • ■■ ■ Sr. General de Brigada D. Antonio López de San- ta Anna. NOTA. El Sr. Comandante General comisionado por la jun- ta de Generales para la decisión de la sumaria, se con- formó en un todo con el dictamen del sr.asesor Alvarado.