MODO DE AUMENTAR DINERO BENEFICIANDO, 3T ruegos á hí sugetos pudientes para que sin riesgo, y sí con utilidad suya y común, jomen- ten á los mineros pobres, i k K X Xabiendo leído algunos pocos de los muchos papeles que han salido sobre el remedio de las cosas que lo necesitan, por que mis ocupaciones no me permiten repetir estas pequeñas recreacio- nes, he advertido que ninguno se encarga del punto céntrico, ó primordial de que depende en la mayor parte el logro de aquellas. Voy á expli- carme. Todos sabemos que sin dinero nada puede hacerse, á la manera del descargo que dió cierto gefe militar, cuando reconvenido por otro,por que no le hizo la salva de ordenanza, le contestó que por que no habia pólvora, con cuya repulsa que- daron todos los cargos desvaratados, de que se deduce que faltando la causa primaria, todas las demás quedan destruidas. En tal concepto, debemos tratar ante to- das cosas de adquirir aquella. No se me ocul- ta que en las actuales circunstancias, es muy di- fícil, por que la complicación de las ocurrenciasno franquean los auxilios necesarios 5 pero por lo mismo, hay mas necesidad de trabajar sobre ello. Confieso que muchas de las veces que me he puesto á discurrir sobre la materia, observaba como agotados todos los adbitrios, especialmente echando la vista sobre los establecidos, por que á la verdad ¿ qué renglón hay sobre que no se haya pensado ? y como los resultados han sido tan mezquinos que no se ha logrado el fin, me resolvía á abandonar la idea que me propuse de buscar medios para que cuando no florezca este Erario, á lo menos reuniera algo mas de lo que reúne para atender á sus mas graves, y executi- vas atenciones. Así permanecí, hasta tanto, que reco- nocí que no debemos tratar de sacar agua de donde no la hay, por que es un tiempo perdido como es fácil conocer, sino de hacer que los ri- cos manantiales que tenémos nos la den. ¿Cuales son estos?Nuestras Minas,único pero precioso manantial, que atendido, puede en- riquecer á todo el mundo. Estas hemos visto que á proporción de los auxilios que han merecido al Gobierno, han aumentado la producion de sus metales con estraordinaria rapidez. Dos ejemplares nos manifiestan de bulto esta verdad. El primero cuando se hicieron las últimas bajas en los azoguez, por reales órdenes de 4 de octubre de 1^76 y otra en el siguiente de 27•> Pues desde entonces aumentó tanto la saca de metales, que llegó al estremo de acuñarse en la Casa de Moneda 27 millones, quedandoexistencia de platas para otros 2, que no se pu- dieron labrar, cuando ántes el año que mas ascen- día de 18 á 20. El segundo fué el establecimiento de res- cates de cuenta del Rey, con el cual vimos flo- recer la Minería, y ponerse en el mayor auge ¿Con que faltándole como le faltan hoy ambos auxilios, y tolerando los suscesos desgraciados que lloramos con motivo de la devoradora insur- rección, es indispensable el tratar de proporcio- nar Jos auxilios necesarios. ¿Pero cómo? con la efi- cacia mas activa, pues ya hemos esperimentadoque ahora que se necesita mas numerario para la manu- tención de tropas: pagos de tantas pensiones á viu- das de militares, crecidos empeños, deudas atra- zadas y demás, es cuando ménos se acuña. El año pasado que ya mejoró algo, res- pecto de los anteriores, se labraron 12 millones, cuando ántes hubo alguno que no se completaron 4 Y i» y en el presente puede que no llegue á 10 según lo que va acuñado, y no faltar mas que dos meses para su conclucion. Es desproporción terrible, pues cotejada la labor del decenio de 801 á 810, con el de 811 á 820 resulta la falta en el segundo de 139.666.490. ps. 7. rs. por que en el primero se acuñaron 226.586.23r. ps. 1. rl. 3. gs. y en el segundo 86.919.^40. ps. 2. 3. gs. advirtiéndose que para el presente año se consideran 10 millo- nes, como se dijo. Con lo espuesto se demuestra matemática-w mente que en el tiempo de penurias, se han deja- do de acuñar 139.666.490. 7. rs. pues aunque las casas de moneda de Guadalaxara y Zacatecas la- braron algo, si no es despreciable su número, lo es su construcción, como que ya vemos el demé- rito con que por necesidad se admite. ¿Cuanto se hubiera hecho con dicha can- tidad? pues su circulación beneficiaba al común y al Erario debia haberle producido 22.616.334. ps. Los 16.431.342. por los derechos del diez- mo de otros tantos marcos que corresponden á los 139.666.490. ps. que se acuñaron, supuesto que según la ordenanza de la Casa, se paga á los in- troductores la plata á 64 reales marco, sacando 68, y los 6.184.992. ps. de la utilidad de la acu- ñación á razón de 4^. por 100 que se regula con aproximación, deducidos los gastos, siendo adver- tencia que lo mismo se hace en cuanto al diezmo, por que no hay unos datos positivos de las leyes de las platas al presentarse en las Tesorerías. Hasta ahora solo va demostrado lo que se ha perdido por los motivos asentados, vamos ahora á ver el modo con que, á mi juicio, puede reponerse, y repito que fomentando la Minería como espuse al principio. ¿Pero el cómo? Hay estubiera la dificultad, si la esperiencia no nos Jo hubiera enseñado. El Real de Tasco, ya hacia en la mayor languidéz: embotados sus giros: sus minas sin fo- mento: su vecindario pereciendo, y todo paraliza- do. Era un funesto cuadro que solo anunciaba «u ruina 5 pero apénas empezó D. Luis de Esco_[5] Var á auxiliar á aquella minería, apersonando competentes sumas para rescatar á los mineros sus platas según las sacában, pagándoles de contado su importe con el corto premio de dos reales en marco que se considera, comprando la plata á jr. ps. cada uno, con mas un real para fondo y pá- go de realistas, y obligación de satisfacer los de- rechos de diezmo, comboy y demás hasta su amo- nedación, por que ántes por falta de este auxilio se veian precisados los mineros á vender Ja pla- ta á s ó 6 pesos cuando mas el marco, y á muy poco tiempo vimos revivir, y aun florecer aquel agonizante, si nó esqueleto mineral. ¡ Asombra sa- ber que en cosa de cinco años ha presentado al quinto 1343)606. mars. 1. onz. 4. ads. que valen sobre poco mas ó menos, por ignorarse las leyes que sacaron en Casa de Moneda, 1.144.151. ps. siendo prevención que después ha hecho estensi- vo su fomento á los Reales de Tlalpujahua, Agan- géo, Sultepec y demás de tierra caliente. ¿ Como se hizo esta resurrección ? Solo con apersonar caudales con que fomentar á los mineros pobres que no permitiéndoles sus esca- sas proporciones, la espera que pide el traer á Méjico sus platas para su amonedación, hubie- ran perecido sin aquel auxilio, pues faltándoles con oportunidad el numerario, por decontado ha- brían abandonado sus negociaciones, y ror con- siguiente la plata quedádose en el centro de la tierra, por que como se dijo, cuando mas les pagaban el marco de plata á 506 pesos. Este benemérito ciudadano, siempre dig- *ra no del mayor reconocimiento, puede lisongearse que ha sido, y es, el redemtor de dichos Rea- les: de sus vecinos: de su minería: de su agri- cultura: de su comercio y de su todo; pero con tal tino, y tanta moderación, que cuando pudo por este medio aumentar sus intereses considera- blemente, se contentó con aquel prudente premio que autorizó Ja superioridad. Mas resultados felices tuvo su grande proyecto, pues se hizo estensibo al Erario pú- blico. Este ha logrado mas de 1229726. pesos por los derechos de las platas en su diezmo, sil* contar con mas de 50®. pesos que seguramente ha utilizado en la amonedación, habiendo amor- tizado con parte de los derechos ^Sdópo. pesos, por que como para aquel fomento no le basta- ba apersonar, como apersonó su caudal, se balíó del prudente medio de que se le admitieran pa- ra la mitad de paga de quinto, los créditos que tenia contra la Hacienda Pública, y he aquí un medio con que todos se beneficiaron. ¿Esto es tener tino, y discurrir con acier- to ! Ya hemos visto que á nadie gravó, cuando por el contrario son incalculables los resultados felices de aquel parto, á cuyo elogio toda me- dida viene corta. ¿Que hubiera dado Guanaxoato y otros Reales, por haber tenido otros Escovares que co- mo verdaderos padres se hubieran dedicado á su apoyo, felicidad, y redención? ¡Ha! Que di- verso se hallaría el Reyno de Nueva España, y con que desahogo hubiera dictado sus provi-ciencias el padre común de la Patria, el Exmó. Sor. Conde del Venadito, cuyos desvelos, exác- titud, y vigilancia, no han perdonado diligencia por hacerla feliz. ¡Ojala pudiera yo hacer el debido elogio de este benigno Gefe, á quien debe el Reyno su pacificación y consiguiente felicidad! ¡Que de afanes, y desvelos no le ha costadp el desem- bolso de mas de 9 millones de ps. vque ha pa- gado la Tesorería General desde el venturoso dia 20 de Septiembre de 1816, en que se aposecionó del mando, hasta fin de Diciembre de 1819! Asombra ver que con tan pequeña can- tidad, colectada á fuerza de inmensos trabajos por lo estenuado que halló el Erario, sin inco- modar á ninguno con préstamos, ni nuevas ga- belas, ni descuentos á empleados, ántes por el contrario, devolviendo aquellos y quitando parte de las otras, ha mantenido las tropas: las ha ves- tido y equipado, pues muchas se hallaba» des- nudas: ha satisfecho todos los sueldos de los em- pleados, y lo que es mas ha pagado algunos créV ditos, y ha subministrado á los pobrecitos Ca- pellanes 998440 ps. a rs. 1 g. en cuenta de sus crecidísimos réditos, que se les estaban debiendo desde el año de 1813. Solo sabiendo con interioridad el estado de la Tesorería General, se puede conocer el ti- no con que se han colectado los 9 millones, y acierto con que se han distribuido. Mas hay que admirar, que en dicha su- ma pagada se hallan 1. 663. 316 ps. o 9 gs\ conque se ha auxiliado á la Renta del Tabaco. Que es decir, que solo se han consumido en manuten- ción de tropas: vestirlas, pagar empleados y pensiones, cosa de ? y i por que lo demás se ha invertido en lo que queda espresado. Todavía hay mas: con haber admitido los donativos graciosos que algunos han hecho de lo que les debia el Erario público, por cier- tas gracias, pagos de sus créditos, ha amortiza- do hasta fin de 1819. 2.010.446. ps. o. 9. grs. sin incluir 244.400. ps. que mandó amortizar en va- rias tesorerías feráneas, con que es visto que cuan- do halló empeñado este Erario en la crecida su- ma que sabemos, lo ha desempeñado en mas de 4 millones, por que lo del tabaco se estimó como pago de lo que de su cuenta habia recibido ante- riormente la Tesorería General. Aquí quisiera yo hallar tal tino en mi es- plicacion, que desempeñando los debidos elogios á tanto beneficio, no se crean partos de adulación, pi ménos interesantes produciones por mis fines particulares. Soy un hombre por naturaleza reti- rado: cortísimo de genio, y conforme con la suer- te en que la Divina Providencia rae ha puesto, y así aseguro, que preduzco esras espresiones por puro desahogo de mi reconocimiento y del que , considero debe animar á todos: pues mis miras solo tienen el objeto de cooperar al bien de la Nación, advirtiendo los medios que me parece pueden contribuir á él. Si fuere tan feliz que lo logre aunque sea en una pequeña parte ¿Qué mas honor? ¿Qué. mas premio que el que de es-,[9l to me resulte? Y si nó, me congratularé por que al fin le. he procurado. Pero vamos al asunto. Supuesto que con lo esperimentado en Tasco, Tlalpujahua y Agan- guéo, vemos la rapidez de sus progresos, parece que está en el orden el seguir aquella huella. Yo entiendo que dedicándose varios sugetos pudien- tes á hacer en otros Reales lo que hizo el insig- ne D. Luis de Escovar en los dichos, por natu- raleza deben esperarse los mismos felices resul- tados, mayormente si logran de la superioridad, como es de esperarse, aquellos auxilios. Aquí dirijo espresamente mis mas activas espresiones á los Señores acaudalados, de dentro y fuera de esta Ciudad, causa por que, y para que llegue á noticia de todos, doy á la prensa este desaliñado papel; pero lleno de los mas nobles deseos, diciendoles: Señores, este es el giro mas piadoso, útil y recomendable, que pueden VV. dar á sus caudales. En él, á mas de que no deben perder, y ántes sí adelantar, harán el mayor be- neficio al Público y al Estado, pues habiendo pla- ta, todo florece: la gente se puede ocupar, y por un termino de refletacion, el Erario, el comercio y agricultura, logran sus respectivos aumenros, pues en este Reyno por lo caro que salen todas sus manufaturas son muy pocos los renglones que se pueden fabricar. Que consideraciones estas para que VV. prefieran este giro á cualquier otro que se les pueda presentar; pues aunque alguno les dé mas crecidas utilidades (que lo dudo) solo las espues- tas reflecciones, hacen atendibles al que propongo.tg>3 No piensen VV. ni remotamente que pue- da yo proceder con alguna preocupación ó en- gaño. No, Sres., lo que relaciono á VV. de los Reales que he dicho: es positivo, y sus felices resultados notorios, pues su benigno autor no ha perdido nada, ántes ganado, y han ganado aque- llas poblaciones predilectas por la Divina Provi- dencia, tocándole mucha parte al Erario Nacional. Con que animo, Señores: hay tienen VV. al desgraciado Guanaxuato, cuyas ricas minas han dado lo que no es fácil calcular, y hoy yacen en la estenuacion mas infeliz, como también otros minerales por falta de auxilios. Imiten VV. al re- dentor Escovar. Den á los Reales de Minas deca- dentes, el auxilio que tanto necesitan. Sean VV. los reparadores de tantos daños, y á semejanza de aquel loable rescatador, sean VV. los reparado- res de tantos males. No es menester esponerse á los riesgos de los que sepultan sus intereses en las minas para sa- car ricos metales, ó pobres piedras. Mi convite ó ruego, es para lo seguro. Esto es, para rescatar lo que ya otros aventuraron y no tienen medios con que realizar sus sacas, y emprehender otras. No teman, pues, esta negociación es del todo segura, y sus utilidades ciertas, pues que el sabio Gobier- no ha permitido interesen los rescatadores en jus- to premio de su abilitacion, la utilidad que he re- lacionado. Con que mientras mas plata rescatáren, es sin duda mayor su utilidad, y como los cau- dales que VV. destinen han de permanecer en po- der de los sugetos que comisionen, ni remotamen- te puede temerse el que los Comandantes lo* tomen[»] en sus apuros, como acaso temerían cuando en 30 de Julio de 1818. se solicitó por el Tribunal del Cónsul ¿do una suscripción para rescates. Y si á esto se agrega que logren VV. amortizar algunos de los créditos con que se ha- llen contra el Erario con la mitad de los dere- chos como sabia y benignamente se le concedió al referido Escovar, calculen cuanto beneficio hacen á este, y cuanto á sus intereses particu- lares. Señores, créanme VV". que á proporción de lo que adelanten por este medio, tanto mas coo- perarán al bien del Erario y del Público, y si no atiendan á esta refleccion. Ya hemos visto que por el medio propues- to presentó al quinto D. Luis Escovar, 134. 606. mrs. de plata, que pagó de medios quintos, dere- chos de ensaye y demás, 64.056. ps. y que amortizó 58.6^0. pesos, Pues bien. Si nó hubiera prestado Escovar los referidos auxilios, podian los Reales de Tasco, Tlalpujahua y Aganguéo, haber producido aque- lla suma. ¿Parece que no? Luego á él se le debe dicho aumento. Mas. En lo general los mineros pobres, como dije, no tienen medios con que soportar 500. ó mas pesos, que con grande trabajo sacan en metales de las minas, y por consiguiente mi- entras los realizan, ó los venden con notable quebranto, por fuerza cesan de trabajar, parando entretanto la labor y saca de metales, pues si los venden pierden y ya no se costean, y si aguar- dan cesan sus labores. Ambos estremos producen perjuicio, ytan enorme, que por necesidad, resulta se sus- penda la labor de las minas, y de su suspensión la ruina y aniquilación de los reales de ellas con positivo daño del Erario en la minoración de los derechos, y del común en la falta de cir- culación del numerario que debe producir la re- petida saca de metales, fomentados con oportu- nidad los mineros. Con que en tal concepto repito, Señores, que en manos de VV. está el remedio de tanta y urgente necesidad. Atiéndanla VV. que yo les aseguro que muy breve verán florecer los reales de minas á que presten su auxilio, y de su re- sulta el Rey no en general. ¿Pero como? gran- geandose el reconocimiento mas sincero: los elo- gios mas recomendables, y la gratitud pública, como que deberán titularse los redentores de los reales á que se destinen, como se ha grangeado del de Tasco, Tlalpujahua y Agangueo el insig- ne benefactor D. Luis de Escovar. Y no piensen VV. que en solo esto pa- rará la gratitud hacia á VV. pues se hará esten- siva á las gracias que dispensa el Soberano con liberalidad á los que hacen florecer el Rey no como se ha pedido en algún informe á favor de D. Luis de Escovar sin solicitud suya. Dios quiera darme la sasisfaccion de que estas reflexiones produzcan los felices resultados que deseo, y á los Srs. que las atiendan el jus- to premio á que se harán acreedores. Méjico Noviembre a de 1820. A. X, Impreso en la Oficina de D. AlexandroValdés,